Tenemos un presidente (¿tenemos un presidente?) que es como el perro del hortelano, es decir, ni come ni deja comer, o dicho de otro modo, ni hace ni deja hacer o también se podría decir que ni propone ni deja proponer a los demás. Eso es exactamente la conclusión que se puede extraer luego de la reunión celebrada el pasado lunes, 5 de septiembre, entre zETAp y Rajoy.
zETAp convocó a Rajoy para nada, excepto para salir en la foto y que hablaran de él un día más en los telediarios. Bueno, pues ya está, prueba superada. Rajoy, sin embargo, sí le propuso al presidente varios pactos entre ambos, que naturalmente zETAp rechazó como no podía ser de otra forma. Como muy bien dice Rajoy, "es muy difícil viajar juntos si no sabemos a dónde vamos", aunque esta frase también podría servir si la decimos en singular "es muy difícil viajar si uno no sabe hacía dónde va" que es lo que en realidad le ocurre a zETAp, también conocido como el rey de la trola y de la bola y esto es a lo más que puede llegar, no le exijamos otra cosa porque no da más de sí.
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