En esta fotografía Alberto Jiménez Becerril y su esposa Ascensión García Ortiz, aún eran un matrimonio feliz que disfrutaban de sus hijos pequeños, pero ETA destruyó a esa familia de igual modo que ha destruido a muchas familias más.
El motivo fue sencillo. El día 30 de enero de 1998 ETA asesinó a tiros a este joven matrimonio porque él era un concejal elegido por el pueblo. Pero que nadie piense que este concejal ejercía su trabajo en el País Vasco, en absoluto. Este concejal había sido elegido por el pueblo sevillano (a casi mil kilómetros del País Vasco), para trabajar en aquel ayuntamiento andaluz.
Hay que ser muy asesinos para matar a tiros a estas dos personas inocentes e indefensas, y muy cobardes para hacerlo por la espalda. Pero así es ETA. (El Boleto. La verdad sobre eta)
Quién les iba decir a Alberto y a Ascensión que diez años después de su asesinato por eta nadie del actual (des) gobierno acudiría a Sevilla para recordarlos y dar consuelo a sus familiares. Así de cruel e inhumano es Z.P. y sus amigos etarras. En esto consiste el compromiso de Z.P. contra el terrorismo: en humillar y ningunear a las Víctimas y a sus familiares.
Descansen en paz Alberto Jiménez Becerril y su esposa Ascensión García Ortiz. Nunca os olvidaremos.
2 comentarios:
No olvidamos y crece con nosotros la fuerza que contagia Teresa y la entereza de aquellos hijos que crec ieron arropados por el honor, la dignidad y la valentía de aquellos a quienes admiramos.
Las Víctimas del terrorismo son de las pocas referencias morales y eticas que nos quedan. Ellos lo han dado todo, incluida su vida, como Alberto y Ascensión y otros cientos más.
No uno sólo, sino un monumento habría que ponerles en cada calle a estos heros.
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