ZAPATERO SIGUE. YO TAMBIÉN. ABIERTO HASTA EL AMANECER DE LA LIBERTAD

Comprendo el desánimo que ha provado en media España los resultados electorales de ayer. Entiendo que incluso se produzcan algunos abandonos entre quienes nos dedicamos a esta tarea tan ingrata como es el hecho de tener que desahogarnos en la Red contra las mil y una tropelías del ZoPenco e incluso que se diga aquello tan recurrente en casos como éste de: "esto no tiene arreglo", "para esto he trabajado yo tanto", o "lo dejo", etc., etc.

Yo, que tengo la piel más dura que el acero, por las batallas en las que he peleado a lo largo de mi vida, no voy tirar la toalla. No lo haré ni aunque el PP hubiese obtenido un solo diputado, porque entre otras razones no estoy aquí para trabajar para ningún partido político ni por dinero, sino simple y sencillamente para defender aquello en lo que creo. El día que tuve la brillante idea de crear este blog lo hice sabiendo la envergadura del enemigo que tenía delante y me propuse que a pesar de ser votante PePero, un resultado electoral adverso para dicho partido, no influiría en mi decisión de continúar dándole leña a este alpargatero sinvergüenza. Podrán cerrar, clausurar, censurar o joderme el blog, pero juro por Dios que al día siguiente creare otro o media docena más. Lo que trato de explicar es que ante las adversidades y el infortunio me crezco y mi depósito de energía aumenta al ciento por cien. Además no soy un enemigo fácil ni cómodo, ni agradable, como ya he tenido ocasión de oir a alguno de mis adversarios. ¡ Vamos, que ay de aquél que me toque los cojones, aunque se llame Zapatero ! (es un decir lo de que me deje tocar los cojones por Zapatero). La razón de ser de Zapaterolandia no es el lustre ni el lucimiento o el virtuosismo personal de quien esto escribe y hace, sino las Víctimas del terrorismo y la defensa de España como nación y mientras las Víctimas estén ahí necesitadas de ayuda y nos quede algo de nuestro terruño al que podamos seguir llamando España, yo seguiré firme de cuerpo y alma y Zapaterolandia abierta hasta el amanecer de la Libertad en España.

La guerra contra Zapatero, como la guerra contra el terrorismo, es la guerra por las libertades, por la democracia. Es una guerra larga en la que tenemos que ser más fuertes que nuestro enemigo, no podemos dar síntomas de flaqueza o debilidad, ni dar un paso atrás o abandonar porque hayamos perdido una batalla electoral o de cualquier otra índole. Los últimos cuatro años de zapaterismo han sido y siguen siendo devastadores para España, pero son una broma comparados con lo que nos aguarda para los cuatro siguientes. En esta contienda todos somos necesarios e imprescindibles. Así es como ganaremos las batallas y también la guerra. Estoy convencido de ello, por eso así lo creo y así os lo prometo.

¡¡ VIVA ESPAÑA, VIVA LA LIBERTAD!!