Daniel Small, también conocido como Geechee Dan, es un indigente del sur de Estados Unidos que llegó a Nueva York no habiendo cumplido aún la veintena y que desde hace años se dedica a cantar clásicos imperecederos del soul en la estación de metro de la Calle 59, ante la mirada de los viajeros. Lo hace con la esperanza puesta en que unos cuantos se decidan a comprarle algunos de los CDs que siempre lleva consigo.
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