La perversión del lenguaje de la socialdemocracia asquea, repugna y la de este tío llamado Pajín produce arcadas. No ha sido suficiente con una ley del aborto en el que un comité hitleriano decide quienes viven y quienes serán eliminados, sino que ahora dan una vuelta de tuerca más y vinculan la dignidad con la muerte, es algo así como que si Pajin te echa una mano para morirte tu muerte será más digna, más progre. Es lo que hacía Hitler con los judios, lo cual no debe sorprendernos en exceso dado que socialismo y nazismo forman el nacionalsocialismo y por tanto comparten muchas ideas.
La dignidad y lo digno corresponden a los vivos, es "inter vivos", no a los muertos, "mortis causa". Llevar una vida digna es tener un trabajo y medios para poder sobrevivir, casarte, independizarte, crear una familia, tener hijos..., todas esas cosas tan propias de los "fachas", una vida digna es no tener la desgracia de sufrir y padecer un (des) gobierno de sicarios, analfabetos y saqueadores como el que tenemos en España, también se puede hablar de dignidad o no dignidad cuando nos referimos al 11 m y a las elecciones posteriores o a los gal o al revanchismo por una guerra civil que han perdido hace 75 años. Una vida digna es tener amor y estimación propios, decencia, vergüenza, decoro, honestidad, nobleza, orgullo, pundonor, honor, rectitud, honorabilidad, respetabilidad, honradez, todo esto tiene mucho que ver con la dignidad de la vida y muy poco que ver con Pajín.
Si Pajín, o alguien como él, te matan puede resultar muy progre o de izquierdas pero no veo la dignidad por ninguna parte.
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