EL ESTADO DEL GOLPE

Hoy las ciencias adelantan que es una barbaridad.

Qué lejos quedan aquellos años dorados en que cuando a uno le daba un arrebatamiento lo curaba dando un golpe de estado, cañonazo va, cañonazo viene, muertos por aquí, muertos por allí, sangre y fuego por todas partes y muchos, muchos presos y detenidos.

Pero hoy día todo eso ha mejorado y cambiado porque la alianza de civilizaciones sigue vigente "creando tensión" y así da gusto y primor dar un golpe de estado. Donde antes había cañones ahora hay buen rollo entre el estado y  los sublevados, donde antes había muertos ahora los golpes de estado, son un complejo vitamínico de dinero que reanima y revive a los golpistas y claro, así se animan, se crecen se vienen arriba con tanto mimo y atención, donde antes había sangre y fuego ahora hay amor y afecto, sin duda debido a la intervención de algunos curas o monjas en estos asuntos terrenales y finalmente a los presos y detenidos que se producian en todo golpe de estado ahora esa práctica ha quedado obsoleta y ya nadie es detenido. No vaya ser que por detener a algún rufián te cuelguen el san Benito de facha. Dios nos libre.

Porque una cosa es dar un golpe de estado tradicional como hizo Hitler o pretendía Tejero con quienes nadie negoció nada y otra bien distinta hoy es perder la compostura del "diálogo" y los buenos modales por parte de los golpistas y del estado. Estamos en  tiempos de la imagen y eso es precisamente a lo que están todos. El golpista no acaba de rematar la faena porque ni tiene medios ni huevos para hacerlo y se entretiene lanzando soflamas virtuales mediante el telefono móvil  o la tv y el estado hace como que no se entera, financiando a los golpistas para que no les falte ni confortabilidad ni comodidad pero con la condición de que den una versión actualizada de un golpe de estado de modo que sea como un golpe de estado pero sin serlo o  que lo sea aunque no lo parezca.

Claro que para llevar a buen fin todo este esperpento es necesaria la figura de alguien como don Prudencio Parsimonia (pp), el típico flojeras y holgazan que ha nacido cansado y que no da ni golpe, cuyo plan secreto para poner fin a todo este adefesio que estamos sufriendo es fumarse un puro mientras lee la prensa deportiva para enterarse de las últimas noticias del partido de fútbol. Bueno, de vez en cuando también se hace alguna sesión de fotos con sus amigos de la misma condición de la psoe, podemos o ciudadanos, para colgarlas en el facebok.

El estado del golpe va por donde estaba previsto, ni hay estado ni hay golpe.

Y mientras tanto al toro se le siguen hinchando los cojones.