No tengo días fijos para su publicación, por la sencillísima razón de que nadie los tiene en el mundo, y es una gran tontería, que solo cabe en cabeza humana, decir: «Mañana escribo, mañana entro....›› sin tener en cuenta lo eventual de la vida mortal.
Este blog no pide seguidores, primero, porque no me da la gana, y segundo, porque a nadie quiero preguntar cómo se llama, donde vive, ni cuántos años tiene.
Este blog tiene el color de la transparencia, y me importan un comino la apariencia de la ecología, el feminismo, el progresismo, el socialismo y el comunismo mientras España sea una feria, de la que cada cual habla y dice según le convenga.
Este blog es chico, y no es grande, porque es bueno, y de lo bueno no se puede dar mucho por dos miserables cuartos.
Zapaterolandia intenta ser un blog ameno, esmeradamente hecho, decorosamente escrito y oportuno sobre todo, y su objeto principal será hacer reír unas veces lo que es mucho más difícil que hacer llorar.
Los maridos desgraciados, los ensuegrados, las solteronas y solterones, los guapos y las feas, los enfermos del alma y del cuerpo, los que desesperan esperando que vuelvan los suyos, las víctimas del desgobierno, todos aquellos, en fin, que estén en disposición de coger el cielo con las manos, deben leer este blog, y hallarán alivio y consuelo.
Zapaterolandia retratará a los tipos de sociedad comunista, socialista, feminista y progre, que los hay en abundancia, y soberanamente ridículos en España, comentará alguno de los hechos, todos los dichos, tomará acta de todas las grandes cosas, así como de todas las grandes tonterías contemporáneas gubernamentales, publicará semblanzas, cuentos, chascarrillos, poesías, críticas, charadas, y artículos de usos y costumbres.
Este blog se diferencia de otros blogs de grandes proporciones que se publican en esta corte en lo siguiente:
En que hace oposición a todos los gobiernos, y también a los perros con bozal o sin el.
En que las tetas aquí no asustan ni dan miedo, ni las que suelen ser guapetonas o frescachonas.
En que solo hablará de lo que el sentido común le dicte, y no se expondrá a decir cualquier disparate.
En que no andará a la greña con otros blogs, como suelen hacer entre sí los del desgobierno, que parece tienen deseo de igualarse con las mujeres rabaneras.
Y basta lo dicho para que se comprenda que Zapaterolandia, aunque es un blog de poca distancia, tiene mucha prestancia.
¡Y ahora, el que lo quiera lo toma y el que no lo deja!
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